Miedo

Cartas
28 abril, 2021
Limerick
28 abril, 2021

Miedo

Le enviamos a los participantes el texto “El miedo global” de Eduardo Galeano y con base en ese texto debían escribir sobre sus miedos.

A continuación encontrarán algunas reflexiones que dan cuenta de los temores con los que viven las personas privadas de la libertad y cómo dichos temores han sido aumentados y fortalecidos por la emergencia sanitaria.

 

¿A qué le tengo miedo?

Por Fredy Alexander Fonseca González
Le tengo miedo a seguir siendo rechazado por tener un pasado feo y oscuro. Sí, realmente le temo a vivir solo y no sentirme con la fuerza suficiente para seguir luchando, a perder todo lo que hasta hoy he podido conseguir. Le temo a ver mi familia separada y muriendo, primero que yo. Le temo a volver a caer en las drogas y [volver a] estar en un lugar como estos. Es tan feo temerle a tantas cosas, pero lo único que no temo es demostrar cómo soy así me juzguen, pero el temor siempre está hoy.

¿Qué es el miedo?

El miedo para mí es una emoción que siempre ha estado con nosotros desde la niñez. Miedo a aquellas historias de fantasmas que nos contaban de niños; miedo a ser recabados o castigados por nuestros padres; miedo a sentirse sol. Para mí la soledad en su totalidad es mi mayor miedo. Le temo porque no quisiera que al salir de aquí mis hijos no me recuerden; miedo a que mi madre no me vuelva a abrazar. La soledad es mi miedo dominante.

Miedo

Llegamos a un lugar donde solo se siente, lleno de miedo, ira y soledad. Una paloma que la cuidaban unos gatos con deseos no muy buenos, para la paloma la amenazaban.

¿A qué le tengo miedo? 2

Miedo a tener Covid y no sobrevivir. Miedo a no enfermarse, pero sí enfermar a otros. Miedo a seguir aquí y no salir; miedo a salir y no poder vivir. Miedo a no tener un trabajo para vivir. Miedo a perder lo que se ama; miedo a no ser amado.

 

¿Qué es el miedo? 3

Todas las mañanas se levanta con la inseguridad de lo que va a pasar, y lo único cierto es que no conocemos el futuro. Por eso, en el corazón y en el alma debemos tener una esperanza viva, unida a nuestro padre celestial.
El miedo es una enfermedad que provocamos y cultivamos nosotros mismos, así que, ¿Qué es lo que tienes en tu mente?

Miedo 2

El miedo es el enemigo de quien carga tantas culpas. Sus culpas muchas veces le producen miedo y no lo dejan dormir. Busca la paz interior, no abuses de los demás, y el miedo será tu amigo y, en lugar de asustarte, te defenderá de infortunios, cosas desapercibidas que pasan, te traerá tranquilidad y te dará grandes ideas de cómo salvarte del peligro. Sé amigo del miedo y te aconsejara.

¿Qué es el miedo? 4

Por Marco
El miedo es mi defensa personal, me advierte la llegada de cualquier peligro. El miedo lo sentimos como algo imprevisto, es un momento en el que nuestra mente está más latente, trabaja a una velocidad luz, aturdiendo nuestros pensamientos. Estos van tan rápido que a veces se estrellan y perdemos el enfoco de las cosas.

¿Qué es el miedo? 5

Es causa del no atreverse, de no tomar los riesgos necesarios, por miedo a los resultados y miedo al qué dirán los demás. Moral y físicamente miedo a perder y miedo al tiempo y sus cambios
Creo y pienso que tendría miedo a esto, por no aprender aun a desprenderse de la vida, de lo material y espiritual. Miedo a la muerte misma.

 

El miedo 3

Por José Sánchez
Mi perspectiva del miedo es que ha existido desde el inicio de la creación. Pues Adán y Eva sintieron miedo y, de hecho, se escondieron de la presencia de Dios, nuestro creador, después de que no hicieron caso a la orden de Dios, nuestro creador.
Le tengo miedo a una escasez de mujeres en una Grace de cajón, pero estando acá encerrado he pensado que ya casi no hay mujeres y eso sí me produce mucho miedo.

¿A qué le tengo miedo? 3

Le tengo miedo a que se acabe la sabiduría, el amor por el otro; a que el mando se rija por sí solo. Le tengo miedo a que la naturaleza se desquite de todo lo que hemos hecho. Le tengo miedo a no ver a mi hijo crecer

¿Por qué le tengo miedo? Es importante, desde mi perspectiva, que el dominio de Dios influye mucho en nosotros, en qué enfrentamos y qué no. Por eso, si faltaran estas cosas, seríamos personas sin uso de razón, sin pensamientos sobre el otro. Nada tendría control.